Resumen de las guias de 2014 para pacientes con patología cardiovascular sometidos a cirugía no cardiaca
Guías de 2014 de la Sociedad Europea de Cardiología (ECS) y de la Sociedad Europea de Anestesiología (ESA) de pacientes con patología cardiovascular sometidos a cirugía no cardíaca: evaluación y manejo perioperatorio
DOI:
https://doi.org/10.30445/rear.v7i2.158Palabras clave:
anestesia, cardiología, Guías ECS, Guías ESAResumen
El hecho de que se escriban guías multidisciplinares tiene especialmente sentido en el caso de pacientes con patología cardiovascular que van a requerir anestesia, ya que hay aspectos de especial relevancia para el anestesiólogo en estos pacientes (el uso de B-bloqueantes, alteraciones en el ECG, etc...), de manera que una serie de recomendaciones pueden ayudar a optimizar el manejo perioperatorio en éste tipo de pacientes.
El número de pacientes con patología cardiovascular que son intervenidos y presentan complicaciones perioperatorias es elevado. Es difícil medir con exactitud la magnitud del problema, pero podemos hacernos una idea en base a los siguientes datos. En Europa, con una población de más de 500 millones de habitantes, se realizan una media de 19 millones de procedimientos de cirugía mayor al año.
Aproximadamente en el 30 % de los casos se presenta comorbilidad cardiovascular. La media de complicaciones oscila entre el 7-11%, y el ratio de mortalidad es de entre el 0,8 y el 1,5%. Más del 42% (167.000) son a causa de complicaciones cardiacas. Además, se estima que para el año 2020 el número de intervenciones quirúrgicas aumentará en un 25%, y la población mayor de 65 años alrededor de un 50%. Por lo tanto, es importante la actualización de estas guías.
Otra de las razones que explica la actualización de estas guías es el manejo de los fármacos B-bloqueantes en el perioperatorio para la prevención de las complicaciones cardíacas después de la cirugía no cardiaca. Las anteriores guías ponían énfasis en mantener el B-bloqueante en el perioperatorio, e incluso recomendaban el inicio del tratamiento con estos fármacos antes de determinadas intervenciones en un cierto tipo de pacientes.
Sin embargo, esto ha sido cuestionado por los resultados obtenidos en el “Ensayo de la Evaluación Isquémica en el Perioperatorio”, en el que se observó que el mantenimiento del B-bloqueo perioperatorio disminuía la incidencia de IAM en este período, a expensas de una mayor mortalidad relacionada con la aparición de accidentes cerebrovasculares (ACV), probablemente secundario a episodios de hipotensión arterial.